los viajes de totoro- oslo

Consejos pequeñitos pero utiles, que te da Totoro para viajar a Oslo, capital de Noruega;
- No viajes a Noruega antes de mayo o te congelarás de frio aun así mete en la maleta, chubasquero, calcentines varios, botas y una bufandita porque por la noche refresca.
- Aunque viajes con una compañia Low cost tipo Ryanair y consigas un vuelo barato, es preferible que factures una maleta con comidita. Tú estomago y tú bolsillo te lo van a agradecer al final. La hosteleria en Oslo es carisisima, un café en un 7-11 puede costarte 3€ y una cervecita no baja de los 6€. Solo venden alcohol en los super asi que los fines de semana la cosa está complicada. Allí no hay ni chinos ni pakis asi que si quieres una cura a base de zumitos y agua del grifo esta es tú ciudad.
Bares y restaurantes aplican un 26% de IVA, locura por eso no se puede salir de marchuqi por esta city a no ser claro que estés forrao. La comida, insisto es mala, aunque la pagues, asi que mejor llevatela de casa o compra directamente en una tienda.
Por la calle hay puestos de gambas cocidas y en los 24h. puedes pillar una especie de perrito caliente que no está del todo mal. En algunos 7-11 puedes tomarte un café calentito con licor de amareto (sin alcohol). El alcohol está muy mal visto por aquí hay como una especie de ley seca ahora como todas las prohibiciones esto hace que la gente se torce en un momento dado más de la cuenta y uno se cruza con muchos borrachines.
-La ropa no es cara pero tampoco bonita. Hay tiendas vintage y rockabyllis en el barrio de Grünerlokka, interesantes, poco más. Esta es la zona más chachi de la ciudad. Situada al este junto al rio, se me pareció mucho al Prenzlauer Berg Berlinés con amplias plazas repletas de cafés y terrazas y jovenzuelos. El bar Boca, es pequeñito y siempre está lleno pero mola. Se puede llegar facilmente en tranvia desde la estación de bus/tren. De este barrio me gustó muchisimo también el centro noruego de arquitectura y diseño, DogA.
- Oslo está lleno de grandes parques, sin vallas ni seguridad ni glorietas, ni cemento ni jardineras feas con flores. Solo espacios verdes inmensos donde disfrutar de la naturaleza, creo que por aqui tenemos mucho que aprender al respecto. De entre todos los parques, la visita indispensable es al Vigeland Park un sitio grande donde ver trotar a unos perricos no, perrazos que tienen estos nordicos en sus casas y que como curiosidad está repleto de unas estatuas en piedra y bronce hechas por el tal Vigeland, un escultor muy conocido en esas tierras. Ahora precaución porque algunas de esas estatuas pueden herir la sensibilidad del espectador, a mi me dieron miedito, con bebes gigantescos llorando histéricos y cosas así. Al parque que está algo alejado del centro se llega bien en tranvia. En realidad casi todo se puede hacer caminando o en bici, allí montan en bici con tranquilidad pero el tranvia está guay y puedes pasar sin pagar ;) Cuando el tranvia está cerca en la parada pone-nà- y eso quiere decir que llega en ná, jiji. Gratis se dice igual, lo demás es mu complicado pero con el inglés se apaña uno como en todas partes.
- El edificio más precioso de Oslo y quizás uno de los mejores del mundo es la nueva Ópera obra del estudio de arquitectura, Snøhetta.
se encuentra situada frente al fiordo de oslo, es blanco y aix! me emociono al recordarlo, hay que verlo, de noche luce una barbaridad.
- Por poco más de lo que vale una cerveza puedes pillar un billete en ferry y darte un garbeo de unas 2h. por el fiordo, ver las islitas y las casa de madera. Madre mia, cuanto espacio y que grande todo, para tan pocos habitantes. En Noruega la densidad de población es mu baja.
- La gente es grande, bigardos noruegos y noruegas ^-^ rubiacos ellos con poca o nada de gracia y malos modos. Se les nota que son gente padentro. No sonrien y no resultan hospitalarios con el turista asi que igual no haceis ningún amiguito.
- Les va la musica, rock duro y electrónica. En el Rockefeller centre, siempre hay buenos conciertos. Yo pillé a The residents y no sabeis la ilusión que me hizo.
Uff! ya está espero que os sirvan estos pequeño consejitos.
Noruega es rebonita pero hasta que no me toque la bonoloto no creo que vuelva por esas tierras.